Ecuador, mayo 2025.- En la actualidad, las transformaciones son clave en la manera en que las organizaciones se comunican con sus públicos. Desde la era del fax hasta la explosión de las redes sociales, cada cambio ha obligado a los comunicadores a adaptarse, innovar y, sobre todo, mantenerse relevantes. Hoy, estamos frente a una nueva disrupción: la inteligencia artificial (IA).
Lejos de ser una moda pasajera, la IA está redefiniendo pilares fundamentales del trabajo comunicacional. Herramientas como ChatGPT, Gemini o Copilot ya no son meros experimentos tecnológicos: son asistentes versátiles que están reconfigurando cómo redactamos comunicados, analizamos medios, personalizamos mensajes y generamos contenido multimedia.
Uno de los primeros usos adoptados por las agencias y departamentos de comunicación ha sido la redacción automatizada o asistida. La IA puede generar borradores de comunicados de prensa en segundos, adaptando el tono, el enfoque y hasta el formato según el público objetivo o el canal de difusión. “Pero, el toque humano sigue siendo irremplazable en especialmente en la elección de ángulos noticiosos o en la gestión de crisis”, afirma Marcela Becerra, CEO de Prnews, una herramienta que reduce significativamente el tiempo de producción y mejora la coherencia entre piezas.
En cuanto al monitoreo de medios, también ha sido revolucionado con la creación de plataformas que integran IA, las cuales son capaces de analizar miles de menciones en prensa, radio, televisión y redes sociales, clasificarlas por tono, alcance, influencia y hasta detectar tendencias emergentes. Esto permite tomar decisiones más rápidas y basadas en datos concretos, algo que hace 10 años parecía una utopía.
La personalización de mensajes, otra tarea compleja en campañas de relaciones públicas, se ha simplificado con algoritmos que cruzan datos demográficos, intereses y comportamiento digital. Según, Marcela Becerra “hoy es posible enviar mensajes casi a la medida de cada periodista, influencer o stakeholder, aumentando significativamente la tasa de respuesta e impacto del mensaje”.
Finalmente, la generación de contenido multimedia que incluye desde imágenes hasta videos breves está siendo impulsada por IA generativa. ¿Se necesita una infografía para redes sociales? ¿Un video explicativo animado? Herramientas como Sora, DALL·E o Runway permiten producir este tipo de materiales en minutos, democratizando la producción audiovisual sin sacrificar calidad.
Hoy, la pregunta que ronda muchas conversaciones es si la IA representa una amenaza para el trabajo del comunicador. “Es una evolución, no una sustitución. La inteligencia artificial es una herramienta poderosa, pero sin criterio humano, ética profesional y sensibilidad comunicacional, se convierte en un artefacto sin dirección”, afirma Becerra
Quienes sepan integrar estas tecnologías en su flujo de trabajo no solo se mantendrán vigentes, sino que liderarán la nueva era de la comunicación estratégica. Porque, al final del día, no se trata de competir con la máquina, sino de colaborar con ella para contar mejores historias, más rápido y con mayor impacto.