GUÍA PRÁCTICA PARA HACER EL TRÁMITE EN EL SRI SIN ERRORES Y CON RESPALDO
En Ecuador, anular una retención electrónica es un proceso que cualquier responsable tributario puede realizar si conoce la secuencia correcta. A través del portal del Servicio de Rentas Internas (SRI), el trámite puede completarse en línea, garantizando respaldo digital y evitando futuras observaciones por parte de la administración tributaria.
El primer paso es ingresar al portal del SRI con las credenciales del contribuyente. Luego, desde el módulo de Facturación Electrónica en la opción de Producción, se identifica el comprobante de retención a anular. Es fundamental verificar que esté vinculado correctamente al comprobante de venta y que los datos coincidan con los del RUC vigente.
Una vez localizado el comprobante, se debe acceder a “Solicitud de anulación”. El sistema solicita confirmar información clave; antes de enviarla, conviene revisar fechas, valores y datos del cliente. Al finalizar, se genera un comprobante de anulación, el cual debe descargarse y archivarse junto con la documentación de soporte (contrato, orden de compra, correo de aceptación del cliente). Días después, es prudente volver al portal y, en la opción Consultar comprobantes anulados, verificar el estado del trámite para asegurar que el ciclo quedó registrado.
Anular una retención puede deberse a errores, cambios en datos o incidencias justificadas. Realizar este procedimiento oportunamente previene inconsistencias contables y sanciones. La normativa establece plazos y requisitos específicos, por lo que es recomendable revisar el calendario tributario y mantener un archivo digital ordenado.
Solo los agentes de retención designados pueden ejecutar esta anulación. El comprobante conserva validez mientras el estado esté “pendiente de anular”. El documento mantiene validez tributaria. Algunas piezas, como las facturas al consumidor final, no son anulables por esta vía y requieren el procedimiento que corresponda.
“Cuando el proceso se entiende y se documenta bien, bajan los rechazos y el cierre contable fluye; el objetivo es darle al negocio control para decidir a tiempo”, señala David Ortiz, CEO de Siigo Contifico.
Para las pequeñas y medianas empresas, anular correctamente y a tiempo no es un tecnicismo: es una rutina de control que protege la caja, evita costos innecesarios y libera horas de trabajo administrativo.