Foto:Ivette Cayo, Mercedes Viteri y Dayana Montenegro; Consultoras de belleza de Natura y Avon.
- Natura apuesta por un modelo de confianza que regenera comunidades. Su programa de microcréditos está transformando la vida de consultoras de belleza que, gracias a la inclusión financiera, hoy son ejemplo de autonomía, liderazgo y progreso social.
Ecuador, noviembre de 2025. En un país donde las mujeres lideran el 85% de la fuerza de venta directa, Natura Ecuador refuerza su compromiso con la regeneración social a través de un modelo de negocio basado en la confianza. Su programa de microcréditos se ha convertido en una herramienta clave para impulsar la autonomía económica, fortalecer la inclusión financiera y abrir nuevas oportunidades para miles de consultoras de belleza que hoy construyen su independencia y bienestar a través de la venta directa.
En línea con su Visión 2050, que marca el camino para evolucionar de una empresa de impacto positivo a una empresa 100% regenerativa; Natura promueve un modelo de negocio regenerativo en el que se construyen capacidades para promover la vida. Es un gana-gana-gana: el negocio, las personas, la naturaleza y las relaciones entre ellas.
El modelo de microcréditos de Natura parte de una premisa simple pero poderosa: confiar en las personas para regenerar comunidades. A través de esta iniciativa, la compañía ofrece acceso a financiamiento a consultoras que muchas veces no cuentan con historial bancario o garantías formales, pero sí con un comprobado compromiso de trabajo, venta y desarrollo. Esta confianza se traduce en progreso tangible: mujeres que amplían su negocio, sostienen a sus familias y multiplican oportunidades en su entorno.
“La venta directa por relaciones es muy resiliente. No se trata solo de vender, sino de construir vínculos basados en confianza, entrenamiento y servicio. El acceso al crédito y el desarrollo humano están en el corazón de nuestra visión regenerativa.”, afirma Hans Werner, CEO de Natura Ecuador.
Esa transformación se refleja en historias como la de Mercedes Viteri, consultora de belleza con más de 30 años de trayectoria en Natura y Avon, quien encontró en la venta directa una oportunidad para reconstruir su vida. «Desde que empecé a vender Natura y Avon, descubrí algo que va más allá de las ventas: el reconocimiento. Cada logro que celebro, por pequeño que sea, me recuerda que soy capaz, que puedo crecer y que mi esfuerzo tiene valor. Esta cultura de reconocer el esfuerzo me ha empoderado como mujer, como mamá y como emprendedora y consultora de negocio. Hoy me siento fuerte, segura y orgullosa de lo que construyo día a día. Ser parte de una empresa que te mira, te celebra y te impulsa, realmente transforma tu vida», comenta.
Con más de 4,8 millones de consultoras y representantes en América Latina, Natura impulsa un modelo de negocio regenerativo que promueve formación constante en habilidades digitales y liderazgo, ayudando a sus consultoras a adaptarse a las nuevas dinámicas del mercado. En contextos económicos desafiantes, la venta directa no solo genera ingresos, sino también independencia, desarrollo personal y vínculos humanos. Cada consultora es una semilla de cambio que contribuye al movimiento económico y social del país.
“Este tipo de programas regeneran, porque permiten que la confianza se traduzca en progreso tangible. Muchas mujeres eligen este modelo de venta directa por decisión, no por necesidad. Porque les brinda independencia, flexibilidad y, sobre todo, la posibilidad de transformar su vida y la de quienes las rodean”, explica María Fernanda León, directora ejecutiva de la Asociación Ecuatoriana de Venta Directa (AEVD), quien además destaca que la venta directa es hoy un motor de inclusión y libertad económica.
En Ecuador, más de 400 mil personas, en su mayoría mujeres, generan negocios propios a través del canal de venta directa, un modelo que adquiere un valor profundo porque se construye desde el esfuerzo personal y su espíritu emprendedor. Con iniciativas como los microcréditos, la capacitación continua y una red que impulsa su desarrollo, Natura fortalece ese camino y acompaña a sus consultoras para que amplíen sus oportunidades y consoliden su autonomía. Así, la compañía reafirma su visión regenerativa y su propósito de bien estar bien: un progreso que nace en cada persona y se multiplica en toda la comunidad.
